La respuesta se hizo esperar cinco días. El gobernador, Juan Manzur, y su vice, Osvaldo Jaldo, respondieron ayer a las declaraciones que había hecho la semana pasada el senador José Alperovich. La réplica a la arremetida verbal fue clara: Manzur cerró filas con Jaldo de cara a 2019.
Alperovich había sacudido al peronismo local cuando, durante una entrevista concedida a LA GACETA manifestó que, si no se presentaba junto con Manzur para la Gobernación en 2019, lo haría por su cuenta y que nadie le iba a prohibir ser candidato. Además, dejó en claro que no tenía relación con el presidente de la Legislatura. Y que él se había “equivocado mal” con los acoples, por lo que ahora propuso su erradicación. De la misma manera, se mostró crítico de la eliminación de partidos comunales en el marco de la Reforma Electoral. A su criterio, eso era “chamuyar a la sociedad”.
El letargo en la contestación se debió a que el gobernador se encontraba en plena gira internacional por Estados Unidos e Italia. Jaldo, a cargo del Poder Ejecutivo de manera interina, había decidido no confrontar con el senador y esperar la llegada de su compañero de fórmula. “En este momento no puedo responder políticamente”, había dicho a este diario un día después de las protestas de Alperovich.
Manzur llegó el domingo a Tucumán. Ese día mantuvo un encuentro, en su casa, con Jaldo, a pesar de que aseguró que se había comunicado telefónicamente hasta tres veces por día durante el periplo extranjero. Ayer, ambos ofrecieron una conferencia de prensa.
“Todos aquellos que quieran ser candidatos y cumplan con la Constitución (provincial) están habilitados para presentarse. No hay proscripción para nadie; cada uno sabe lo que hace”, respondió el gobernador. Y luego explicó que, más que las candidaturas, lo que importa es la gestión. “Nosotros vamos a seguir trabajando. Todos ven el esfuerzo que estamos haciendo, el trabajo que venimos llevando adelante. Dialogamos con todos, generamos consenso y tratamos de mirar para adelante. Obviamente con Osvaldo (por Jaldo) siempre pensamos más allá de 2019. Esa es nuestra vocación”, argumentó.
¿Si tuviera que definir a su compañero de fórmula, se repetiría?, se le consultó en la conferencia. “Sí, si venimos trabajando juntos, es lo normal (que se repita la fórmula). Es lo normal, es lo lógico, pero hoy estamos en un momento difícil y trabajamos a destajo para cuidar a Tucumán. Vamos a privilegiar la cuestión, por eso avanzaremos el miércoles (por mañana) con la reforma política como nos permite la Constitución y seguiremos trabajando con la aspiración de que (nuestra tarea) exceda al 2019”, respondió el mandatario.
Jaldo asentía ante cada concepto de Manzur. “Fuimos claros con el gobernador. Ninguna declaración pública, mediática, desde adentro o desde afuera (de nuestro espacio), nos va a hacer cambiar las decisiones institucionales y políticas que tomamos con Manzur. Las respetamos, pero con el gobernador tomamos la decisión de seguir trabajando por Tucumán y políticamente estamos reordenando el Partido Justicialista, uniendo a los justicialistas”, insistió. Y agregó: “yo no me peleo con nadie nunca”. Así, aludió al distanciamiento con Alperovich.
Acoples y reforma
En la antesala de la primera modificación dentro de la reforma electoral propiciada por el Poder Ejecutivo, Manzur defendió la eliminación de 600 partidos vecinales con una ley. Insistió en que el sistema de acoples puede mejorarse y que no se lo puede eliminar sin retoques constitucionales. “Hay que cumplir con la Constitución. El acople forma parte de la Constitución y la vamos a hacer respetar. Hasta que no se la modifique, los acoples van a seguir funcionando”, sentó posición. ¿Los acoples fueron un error, como dijo Alperovich?, le consultó este diario. “Creo que es un sistema que permite la participación de todos aquellos que tienen apetenicas de ocupar un cargo público. ¿Es perfectible?, sí, es perfectible. Todos los sistemas siempre son perfectibles. La Constitución habla de que tenemos acoples y hasta que no se la modifique la vamos a respetar”, evadió la consulta.
Sin embargo, en cuanto al voto electrónico -que la reforma constitucional en 2006 ordena su aplicación-, el gobernador fue menos constitucionalista. “En el mundo el voto electrónico ha fracasado, hay que decirlo. En los países más avanzados, con las democracias más importantes, el voto electrónico ha fracasado. Los países que lo habían implementado dieron marcha atrás y volvieron al viejo esquema. No debe haber ninguna máquina entre el ciudadano que vota y su elección. Desde mi punto de vista no tiene ninguna aplicación, es oneroso, requiere una aplicación importante así que descarto de plano aplicar el voto electrónico en Tucumán”.